Con una superficie de 1,65 hectáreas, rodeada de de bosques, montañas y hermosas formaciones rocosas, la finca cuenta con amplias vistas al valle del río Matarraña y a la cuenca del río Guadalope.
La masía de piedra, de 85 m2., necesita algo de rehabilitación en el tejado. Además, cerca de la casa hay una típica balsa donde se reserva el agua de lluvia.
Los accesos a la propiedad son excelentes, y está a medio camino de Maella y de Mazaleón.
El lugar es muy tranquilo y goza de gran privacidad.